Autora: Ivon Esquivel Altman
Ven enciende la llama
de mi corazón,
ilumina mi ser con tu resplandor
y envuelveme en tu candor,
En ocaciones cuando despierto,
siento un vació incierto,
porque no te tengo,
porque no te siento,
Pienso en ti,
y en tu magnifica existencia,
con pasión te busco,
y lloro por tu ausencia,
mi corazón no se resigna,
y reclama tu presencia.
En la soledad de mis aposentos,
inclino mi rostro hacia ti,
te busco en oración
te busco en tu palabra
y en la grandeza de tu perfección.
Entonces inclinas tu rostro hacia mi,
diciéndome porque lloras amada mía?
nunca me fui,
siempre estuve aquí,
muy dentro de ti,
siempre estaré contigo,
en la tormenta y en la calma,
seré tu paz, tu guardián, tu guía
tu mejor salida,
tu llama encendida.
Autora: Ivon Esquivel Altman
Publicado: 24/06/2010